Hay tres elementos claves en el buen diseño de la habitación de los niños: la belleza, la funcionalidad y la alegría.
1. LA BELLEZA
La habitación de los niños debe ser bella. Desde temprana edad se forma nuestro gusto y estilo. El ser humano en su infancia es sensible a la belleza y la fealdad. Lo que nos rodea tiene un gran impacto en nuestro sentido de la estética más tarde. Es algo así como la lectura de libros. Las personas que leen son, por lo general, aquellos a las que sus padres les leían cuando eran pequeños. Con las visitas a los museos o galerías pasa lo mismo. Estos conceptos que se nos planta en la infancia nos acompañan en la vida posterior.
2. LA FUNCIONALIDAD
Hablando sobre la funcionalidad no me refiero solo a la colocación de los muebles. La seguridad y la zonificación también son muy importantes. La división proporcionada de la habitación de los niños necesita tener arias para:
– El sueño y descanso.
– La creatividad, donde se dibuja, juega, o estudia.
– El almacenaje (en el cuarto de los niños nunca hay demasiados armarios o estantes).
Una vez que ya hemos establecido las zonas funcionales y los muebles, debemos analizar la luz natural y artificial. El diseño y colocación de las lámparas depende de las necesidades y el estado de ánimo. Ciertamente, no se puede olvidar estos detalles sobre la iluminación:
– fuente general que ilumina todo el espacio;
– lámpara al lado del escritorio o la mesa;
– lámpara al lado de la cama, para leer libros a los pequeños;
– iluminación ambiental con un “dimmer”, que se puede usar durante la noche, para que el niño se sienta más seguro.
En la habitación de los niños debemos tomar en cuenta la seguridad. Lo más importante es evitar tropiezos o golpes con las esquinas de los muebles. Necesitamos eliminar todos los elementos cortantes. Algunos niños sueñan con dormir en una cama camarote, pero a los padres no les gusta la idea de una cama alta. Sin embargo, las barreras apropiadas mejorarán la situación. Cuando decidimos a comprar una, necesitamos recordar que la escalera debe ser estable y poco empinada. Los beneficios de estas camas son muchísimos. No sólo ahorran espacio, sino que también les ofrecen un poco de privacidad a los niños cuando empiezan a crecer.
En cuanto a los muebles, lámparas, textiles y pinturas, es mejor elegir los que tienen certificados de seguridad, que son duraderos y fáciles de limpiar. En caso de las telas o las alfombras es mejor escoger algunas anti-alergénicas y fáciles de limpiar.
En resumen, la habitación debe ser segura pero sobre todo cómoda, tanto para el niño como para los padres, porque probablemente ambos van a pasar muchas horas jugando juntos.
3. LA ALEGRÍA EN LA HABITACIÓN DE LOS NIÑOS
Después de todo, lo más importante es que los infantes se sientan bien y sean felices en su espacio. Los colores aquí son cruciales. Me encantan los cuartos blancos y limpios en estilo escandinavo. Sin embargo, la psicología dice que el color estimula el cerebro de nuestro pequeño, entonces es mejor escoger algo relacionado con su personalidad. Sobre la influencia de los colores en nuestro comportamiento he escrito en mi último artículo (haga click aquí).
¿Qué tipo de diseños para niños te gusta? ¿Prefieres colores neutros, estilo minimalista o colores fuertes y alegres? Si quieres ver más ideas puedes visitar mi Pinterest.